Esta noche lo tenía claro, lo tenía prometido. Quería iluminar el blog con una historia de amor infinito que desde hace días me ronda la cabeza. Un relato distinto. Un relato que dijera diez o doce veces la palabra "tú". Bastantes veces la palabra "felicidad". Cinco o seis veces la palabra "esperanza"...
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Tenía que ser un relato distinto a los que siempre escribo. Tenía que tener una dosis extrema de alegría. Tenía dos bolígrafos nuevos para escribir tu nombre. Incluso guardé sonrisas para estrenar, para acompañar la dicha, el encanto, la ternura...
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Pero llegó la madrugada y trajo tu recuerdo. Estuvimos hablando los tres de ti y se hizo tarde...
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Y me quedé dormido.
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STEVE
4 comentarios:
... y seguro que en vez de escribirla soñaste con esa historia de amor infinito :)
un abrazo
hombrepordios!!!! cuantas veces tengo que morir y resucitar aqui en tu blog????????mmmmmm??
dimelo steve....
cada palaabra es bella es hermosos lo que escribiste..... felicidades por ese corazon 5 estrellas que tienes
besines hermosos ser!!!
Genial.
Sin decir lo has dicho todo.
T.Q
Y es que hay recuerdos que fastidian toda alegría ¿verdad?
Besos
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